Yo decido hacerme responsable de mis emociones

"No son los eventos que nos suceden lo que nos causa el sufrimiento sino nuestros pensamientos con respecto a ellos."- Epictéto

"Eso me pone triste", "no es justo que hagas eso contra mi", "vos hacés todo para enojarme", "¿por qué me pasa esto a mi?, "no soporto a esa persona", "escucharle a él me desespera"...

¿Te parece que alguna frase similar ha pasado por tu cabeza o inclusive ha salido de tu boca?

Es normal, a todos nos pasa, es el mecanismo de defensa más común que tiene nuestra mente para no hacernos responsables de hacer que las cosas sean diferentes, la ley del mínimo esfuerzo, lo que requiere de menos energía. Mientras tanto el mundo sigue y nosotros nos devastamos en el tren de pensamientos que arrastra más emociones de bajos recursos.

 

 

Vivir pretendiendo controlar el mundo, creando expectativas y queriendo que sean cumplidas es una manera absurda de alimentar el ego y es además la mejor estrategia para llevarnos en dirección al sufrimiento.

"Si alguien tiene éxito en perturbarte, dáte cuenta de que tu mente es complice de esta provocación."- Epictéto

Solo cuando nos hacemos responsables de nuestras emociones podemos llegar a cambiar la experiencia del momento presente.

De nada me sirve decir cuantas veces se han equivocado los demás si no me doy cuenta que lo más debilitante es dirigir mis energías a las emociones que esta perspectiva me ha generado, de nada me sirve decir cuanto he crecido y cuan inteligente soy si no soy libre de sentir las emociones disruptivas que me alejan de la virtud.

Nosotros creamos realidades a partir de nuestras manifestaciones lingüísticas, sentimos a partir de lo que hablamos, pensamos y generamos una experiencia física que acompañan la situación. Lo seres humanos tenemos la capacidad de utilizar el lenguaje para comunicar, para crear o destruir.

Quiero que te des cuenta de que es lo que está sucediéndote internamente al momento de expresar tu perspectiva de las cosas, quiero que seas consciente y decidas de una vez por todas si la forma en que estás y te estás contando la historia te está abriendo posibilidades o te está llevando al papel de víctima; ese que caracteriza a una persona que sufre, a quien le hacen algo y no puede hacer nada al respecto.

Recordá que tu esfera de poder(mis pensamientos y mis acciones) siempre estará con vos, es cuestión de decidir cambiar de presa a cazador. Parafraseando a Marco Aurelio: quitále la etiqueta de dolor a eso y el dolor se irá de ello. Está en nuestras manos cambiar de perspectiva o actuar con virtud para hacer que las cosas sean diferentes, hasta donde nos sea posible.

Cuando algo pasa, naturalmente tendrás la tendencia de generar juicios a partir de enfrentar tus expectativas ante lo sucedido, prestále atención a los pensamientos y emociones que surgen y date la oportunidad de contar una historia que te genere mejores estados para actuar con tus mejores recursos.

Tendrás que elegir entre lo más sencillo y automático; buscar afuera de vos culpables, razones, responsables y soluciones que sean ejecutadas por otros, o asumir la responsabilidad de que las cosas sean diferentes eligiendo el camino que te va a asegurar estados que te empoderen, que te alejen del sufrimiento en forma de ansiedad, enojo, estrés y que más bien te vayan formando tu carácter y habilidades para estar preparad@ para situaciones que a veces no ves venir y no esperás que lleguen.

"No desees que las cosas no te sucedan sino estar preparado para todas ellas."- Epictéto

Solo cuando ponemos la mirada hacia nosotros mismos nos aseguramos vivir al máximo el momento presente y la posibilidad de crear futuros diferentes. Aprovechar cada situación para entrenar la virtud(sabiduría, empatía, auto-control, justicia) es el camino del para ser el mejor ser humano que podamos ser.

Las emociones no se controlan se aceptan. Atrapas el tren de pensamientos que viene con cada una de ellas, observas los pensamientos, decidís que hacer al respecto, y cuando cambias tus pensamientos cambias la experiencia.