Un líder es quien decide servir y guiar a las personas que se unen a su camino por medio de una visión de futuro atractiva comunicada de una forma clara e inspiradora. Un líder apoya a los demás a descubrir sus mejores recursos y florecer en su mejor versión.
Un líder no puede dar lo que no tiene.
💡 Tener valores y aptitudes para guiar, servir, influenciar y empoderar a otras personas creando espacios seguros y ofreciendo herramientas para que con la mayor flexibilidad se alcance un objetivo común. - Líderes en Comunicación Humana, Marzo 2022
Muchos hemos sentido esas ganas de contribuir, ser parte de algo más grande que nosotros mismos, trascender y dejar un legado, conocer, integrar, crear y compartir. Es difícil apagar el impulso de contarle a las personas más cercanas nuestros descubrimientos, lecciones aprendidas, o inclusive las cosas valiosas más sencillas como “el nuevo restaurante”, “la serie que estoy viendo”, “la película” o un nuevo grupo de música....
“La felicidad existe solo si cuando se comparte” decía Alexander Supertramp en la película “Into the wild”, y es que como seres sociales el reconocimiento de nuestra realidad le da sentido a la vida.
No necesitamos un puesto, una etiqueta o un título para liderar. Cada vez que estás interactuando con tu pareja y le ayudás a ver un nuevo punto de vista, cuando estás con tus amigos y proponés un viaje o paseo, todas las veces que has hecho una pregunta que ilumina la mente de los otros, al interactuar con tus hijos y por supuesto cuando se te ocurre una idea genial que querés compartir, has estado liderando. Lo hacés, es natural, así es como vivís una vida funcional y social.
Para hacerlo de la mejor manera se requiere consciencia, o sea, decidir tu intención de liderar y además hacerlo con las mejores herramientas no solo estratégicas sino con los recursos internos para de una forma asertiva y congruente comunicar tus deseos, objetivos, necesidades, requerimientos, observaciones, emociones y perspectivas.
Comunicar, es una palabra de que viene del latín “Communicare” que literalmente significa, poner en común. Poner en común implica tener la capacidad de expresar ideas, recibir ideas y a partir de ellas construir con las partes involucradas una realidad compartida.
El reto está en que nuestra forma de comunicarnos está lejos de ser perfecta, no es una fórmula sino un arte. Cuando hablamos, estamos expresando nuestra forma de ver el mundo y al hacerlo necesariamente dejamos información por fuera, generalizamos algunas cosas y sin duda lo hacemos con una perspectiva distorsionada de la realidad. Es que absorbemos información del mundo exterior a través de nuestros sentidos y en el mejor intento asignamos palabras basados en nuestras experiencias pasadas que incluyen significados subjetivos, conocimiento adquirido, conceptos abstractos y paradigmas que provocan un diferencial no solo entre “el mapa y el territorio” sino entre el mapa de cada uno.
Primero que todo con voluntad y segundo con una práctica intencionada. Una práctica intencionada implica tener claridad en cómo funciona nuestra mente, nuestras emociones, cuáles son las habilidades de comunicación y cómo utilizarlas de la mejor manera, las técnicas para escuchar, hacer preguntas, generar un espacio seguro y guiar una conversación para llegar a acuerdos. En fin, como me gusta decirlo, “la practica no hace al maestro, sino más bien, la practica intencionada, hace al maestro”.
“En primer lugar, no hagas nada sin reflexionar y sin finalidad; y por lo demás, no tengas otro fin sino el bien de la sociedad” -Marco Aurelio. Libro 12, meditación 19.
El mundo necesita de más y más personas que asuman la responsabilidad de lo que pueden controlar, de este modo estaremos accionando en dirección un mejor futuro.
De lo que podemos controlar, nos corresponde trabajar por ser lo mejor que podamos ser en nuestros cuatro poderes personales: lo que pienso, siento, digo y hago.
Quien quiera vivir una mejor vida e impactar a quienes le rodean, tiene una tarea sencilla en el sentido en que su enfoque está únicamente en su esfera de poder— sus cuatro poderes personales, mas esta tarea requiere de atención, entrega y determinación. La mejora de uno mismo es el camino de la autoactualización.
“El camino a la excelencia requiere de pequeños pasos mas no es una pequeña cosa” - Zenón de Citio
— Si por negativo definimos aquello que es opuesto al bien común, es decir, el bien de la mayoría, entonces te puedo decir que definitivamente sí existen los líderes negativos y, lo que nos corresponde es erradicar este tipo de liderazgo con más liderazgo positivo, liderazgo humano— con más Líderes en Comunicación Humana.
Jorge
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