"Ser humano no es fácil; encontrar una manera para abrazar la tensión de los opuestos— queriendo certeza pero aceptando la incertidumbre; queriendo permanencia pero aceptando la trascendencia; deseando vivir por siempre pero aceptando la mortalidad— esta es la esencia de la integración." -Daniel Siegel, MD.
¿Qué es la mente? ¿Qué implicaciones tiene para nosotros tener una mente? Además, ¿qué significa tener una mente saludable y qué está en nuestro poder para lograrlo?
Personalmente había definido de manera sencilla la mente como un proceso de comunicación entre nuestro cerebro, nuestro cuerpo y el entorno. Sin embargo, gracias a mi necesidad insaciable por el conocimiento y mi fascinación por la experiencia humana, conocí el trabajo del doctor Daniel Siegel y me he visto inspirado e influenciado por su manera de comprender el mundo mental y basado en esta exploración definiré algunos conceptos e ideas que nos permitirán entender nuestro rol en el mundo de lo que no se ve y que nos acompaña— la mente.
La mente es un proceso constante de energía e información que fluye tanto internamente como con el mundo exterior y nuestras interacciones. Como un proceso, resulta ser algo complejo pues existen muchas variables que pueden alterar el sistema. Siegel, propone que este proceso tiende a la integración y que la integración es el mejor indicador de una mente sana, pues nos ofrece armonía. Alejándonos del caos y la rigidez.
La integración requiere de conexión y diferenciación. Si algunas áreas de nuestra vida no son respetadas por sus diferencias y otras no son conectadas libremente, esto implica que las capacidades de conexión y diferenciación están limitadas. Reconocer los estados de caos o rigidez es el primer paso para acercarnos a una vida saludable y el siguiente paso se trata de prestar atención para mejorar nuestra capacidad de diferenciación y promover la conexión cuando sea necesario. En otras palabras, nuestra salud mental depende de hacernos cargo de nuestra capacidad reflexiva para darle sentido a las cosas de una manera flexible, reconociendo lo que es necesario conectar y lo que de repente simplemente es diferente, sin caer víctimas de los estados caóticos que abruman y nos traen abajo, y los estados rígidos que nos limitan y nos quitan energía.
Cuando una mente no ha logrado conectar con el mundo interno para darle sentido a las cosas; encontrar una narrativa coherente y que se siente arrastrada por el mundo de las experiencias físicas, ha caído en caos. Y, cuando una mente se aleja de las experiencias físicas, no tiene conexión con el mundo emocional y no se permite descubrir nuevas experiencias trascendiendo sus pensamientos, se ha vuelto rígida. Mientras una versión se siente abrumadora, la otra no nos permite avanzar. Y según Daniel Siegel, este es el origen de nuestros problemas. Esta es la razón por la que nos encontramos en estados desgastantes que no promueven una mente sana. Caos y rigidez. Los estados caóticos siendo aquellos en los que no logramos regular las señales de nuestro cuerpo. Y los estados rígidos suceden cuando nos hemos desconectado de las señales de nuestro cuerpo.
"La ausencia de deseos produce reposo. Y el mundo se pacifíca por sí solo." -Tao Te Ching
Pero una mente humana, es capaz de darse cuenta de su estado mental, con la auto-reflexión. Esta es una particularidad interesante que nos caracteriza. Siegel ofrece una perspectiva interesante al hacernos saber que esto puede ser una ventaja pero también una desventaja, pues, la mente tiende a la integración— en un sistema complejo, las cosas tienden a la integración— y esto implica que la mente es capaz de ordenarse a sí misma y muchas veces somos nosotros mismos los que obstaculizamos el proceso. Cuando permitimos que la mente se organice, entramos en un flujo de integración producto de una mente flexible, adaptable, coherente/resiliente, energizada, y estable.
¿Qué es una mente saludable?
Una mente coherente, por el acrónimo creado por Siegel en inglés: COHERENCE.
C: Conectada (connected)
O: Abierta (open)
H: Armoniosa (harmonious)
E: Comprometida (engaged)
R: Receptiva (receptive)
E: Emergente (emergent)
N: Autoconocimiento espiritual (noetic)
C: Compasiva (compassionate)
E: Empática (empathic)
"Pero a lo mejor nosotros no somos lo que nuestros pensamientos nos sugieren que somos. Limitamos nuestro bienestar si limitamos nuestro sentido de identidad por separarnos por completo de los otros y el mundo que nos rodea." -Daniel Siegel, MD.
La mente es un flujo de energía e información que no está limitada a nuestro cráneo o nuestra piel, sino que también es relacional. Nuestra mente es un flujo de energía que ocurre en cada instante y como especie social, ocurre en nuestras interacciones sociales.
Si queremos tener una vida plenamente humana, debemos de elegir muy bien nuestras relaciones y aprovechar la comunicación para expandir nuestras perspectivas, confiando en que la mente tiende a la auto-organización, quitándonos de en medio y dando pie a la integración, alejándonos de los estados de caos y rigidez. Si has sentido esos momento de iluminación en medio de una conversación, bajo la ducha o simplemente sin esfuerzo te ha llegado una eureka, sabés a que se refiere el Dr. Siegel con integración.
Jorge
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