Apunta a la grandeza y actua en congruencia

"¿Cuánto tiempo más vas a dejar que pase antes de demandar lo mejor de ti y confiar en la razón para determinarlo?" -Epicteto

Muchos quieren lograr sus objetivos— desde el más elevado, hasta el más sencillo— pero, pocos están dispuestos a pasar por el proceso. Someterse a un proceso, es un perfecto "bootcamp" de la vida. Es decir, es un acelerador e intensificador de la experiencia humana completa, en cuanto a: emociones, éxitos, fracasos, desilusiones, relaciones, aprendizajes, ideas, lecciones, logros, reconocimientos, estrés, incertidumbre, resiliencia, errores, creaciones, riesgos, etc.

Ver los logros de otros, las fotos de los atletas con su copa, conocer las historias de las personas que rompen récords, seguir temporada a temporada los equipos que luchan por ser campeones en sus respectivos deportes, conocer las noticias de aquellos empresarios o emprendedoras que están logrando cosas increíbles, todo esto puede resultar inspirador. Y es así porque nos recuerda de lo que somos capaces, como especie. Entonces, más de uno empieza a soñar y entrar en un estado de insatisfacción con su estado actual, sabiendo que puede ser mejor, sabiendo que puede más, pero sucede algo lamentable; Su energía parece no estar disponible para hacer realidad su sueño. Dos cosas debo decir la respecto. Primero, no les culpo, no es el camino fácil y por naturaleza tendemos al ahorro de energía. Dos, qué triste debe ser una vida en la que sintás el llamado a exceler y no atender este llamado. Porque aunque no lo querás, internamente, siempre estarás recordándote que no estás siendo fiel a tu potencial.

Personalmente tengo una inclinación imparable por lograr mi máximo potencial y manifestarlo con mis acciones. Es por ello que siempre estoy buscando retar mis habilidades físicas y sobre todo, mentales. Gracias a ello, en cinco años, no solo he logrado vivir de mi propósito y ser un referente en mi país en cuanto a mentalidad y filosofía Estoica, sino que junto con mi esposa hemos fundado La Academia Mind Coach para ayudar a líderes a crecer profesionalmente y vivir una vida balanceada por medio de nuestro programa: Líderes en Comunicación Humana. Con nuestro trabajo estamos creciendo e impactando a humanos en todo latinoamérica. Es por ello que me gustaría compartir con vos mis cinco premisas para lograr metas.

Mis 5 Premisas para lograr metas

1. Hacer que las cosas sucedan

Hacer que las cosas sucedan se trata de una premisa que te recuerda que vos sos la única persona responsable de tus metas. Que el mundo gira y no a tu alrededor, que las personas nunca van a estar más comprometidas con tus metas que vos mismo y que en medio de todo lo que no podemos controlar, tenemos el poder de hacer hasta el último esfuerzo para alcanzar lo que nos hemos propuesto. Ya sea un cambio de hábito, sacar una maestría, emprender, buscar una meta deportiva, un puesto de trabajo, etc., hacé que las cosas sucedan. Asumí la responsabilidad de tus sueños.

2. Desapego con los resultados

Una vez que visualizás lo que querés alcanzar y soñás con "la gloria", dejá esa imagen en la parte de atrás de tu mente como un recordatorio para inspirarte, pero enfocá tu atención en los pequeños pasos que harán posible esa realidad, tarde o temprano. Los resultados, no están en tu control mas podés influir, mucho más de lo que creés, en tu entorno. Desapegarte de los resultados es una actitud sana y realista en un entorno implacable. Esta es la clave para nunca desistir y disfrutar el camino. Creo que no existe mayor satisfacción que saber que lo diste todo, momento a momento.

3. Asumir riesgos

Podés quedarte en dónde estás, haciendo lo que hacés, aprovechando la oportunidad de la comodidad y eso está bien. Pero si al menos una pequeña parte de tu ser no está conforme con las cosas o se está quejando, te corresponde asumir riesgos, es decir, tomar decisiones que te pondrán en una situación que antes no conocías, viviendo experiencias nuevas, retando tus ideas, expandiendo tus habilidades y gastando más energía que si te quedaras en el status quo. Yo no conozco la grandeza sin haber pasado por "dónde asustan".

4. Nunca pretender que las cosas salgan como vos querés que salgan

Si planeás para ganar fácilmente, estás teniendo un pensamiento simplista de causa-efecto. Si pretendés que todo salga como lo esperás, se te ha olvidado que no tenés mayor poder que cambiar tus opiniones y actuar como mejor te parezca. Si te digo que, por más maravillosos que sean tus planes, la probabilidad de alcanzar lo que te has propuesto, es mínima. ¿Aún así lo intentarías? Recordá que intentarlo es más digno que seguir soñando despierto. No se trata de atraer el pesimismo sino de quitarnos de encima cualquier pensamiento infantil que pretenda que el mundo satisfaga nuestras expectativas.

5. Planificar

Cuantas veces sea necesario planificá y revisá tu plan. Tener un plan como guía es fundamental para dirigir la energía. Un plan no es una estructura rígida sino un marco de referencia para saber qué dirección tomar. El plan debe ser revisado constantemente y estructurado en pequeños detalles— pequeños pasos, recursos necesarios y disponibles, plazos, indicadores de progreso y evidencia de resultados. Nunca, nunca, iniciés el camino en dirección a tus sueños sin un plan. Aunque el plan no te asegura el éxito, no tenerlo te asegura el fracaso.

Yo creo en el potencial humano, de hecho, es la razón de mi trabajo. Yo creo en los sueños de mis clientes y por ello es que amo lo que hago. Yo creo en el cambio y por esto es que estoy convencido de que todos podemos vivir una vida más alineada a lo que soñamos. Yo creo en que los seres humanos estamos diseñados para el éxito y para ello necesitamos conectar con nuestras necesidades más elevadas e inspiradoras— una vida intencional. Una vida en congruencia.

Jorge